jueves, 20 de septiembre de 2012

CHEMTRAILS



Basado en falsos estudios realizados en base a un ficticio calentamiento global, se recomendaron toda una serie de técnicas aparentemente apropiadas para bloquear la luz solar que llega desmesuradamente a la tierra. Con el máximo énfasis se presentó un procedimiento que es congruente con la Patente de Welsbach de Chang y Shih. Para poder disminuir el calentamiento de la atmósfera terrestre, deben esparcirse partículas reflectantes en la estratosfera, como por ejemplo aluminio. 
La Academy of Sciences propuso al respecto dispersar las partículas reflectantes de polvo a la máxima altura mediante aviones.

¿Por qué es un tema secreto? 

El esparcimiento de los chemtrails infringe innumerables reglamentos internacionales sobre el medio ambiente y choca con cuestiones fundamentales de la soberanía nacional, así como con cuestiones relacionadas con la protección del propio espacio aéreo. Poner en circulaciones aviones “anónimos” es ilegal incluso en tiempos de guerra, pero lo que los despegues y aterrizajes deberían producirse exclusivamente en aeropuertos militares de una potencia extranjera, que sobre un territorio goce de amplios derechos soberanos, como p.ej. Alemania. Aquí se podría tratar exclusivamente de las Fuerzas Aéreas Norteamericanas. A ello se añaden cuestiones de peso relacionadas con la responsabilidad jurídica en el caso de la aportación de pruebas de daños en el ser humano (enfermedades, problemas psíquicos) y en el medio ambiente (cuestiones de responsabilidad dentro del Derecho Internacional). ¿Cómo se va a hacer frente a las demandas e indemnizaciones por daños y perjuicios de grupos ecologistas, así como también frente a las reacciones públicas de indignación? Por la magnitud de los problemas que se originarían, se recomienda para ello naturalmente un procedimiento secreto, que en caso necesario, se vinculará con la estrategia de “negación plausible” dentro de las relaciones públicas. Si se hicieran públicas las interconexiones, esto llevaría con una limitada probabilidad en seguridad, a la suspensión del programa chemtrail, al menos en Europa. 

Argumentos en contra poco convincentes

En el contexto de las “estrategias en contra” por parte de las autoridades (especialmente en los EE.UU.), hay que hacer referencia a dos de los argumentos más frecuentemente presentados de aquellos que lo que desmienten. Estos argumentos se pueden desmontar tras una cuidadosa observación: Por un lado, siempre se remite a las formas de aparición extremadamente diversas (consistencia, duración de disolución) de estelas de condensación normales. Se pueden observar con un poco de paciencia en un día de chemtrails innumerables aviones, que o no dejan ningún tipo de estelas de condensación o dejan unas completamente distintas aunque estén circulando por el mismo lugar y a una altura comparable a la de los aviones “fumigadores”. A diferencia de ello, los vuelos chemtrails producen siempre gruesas estelas de condensación, que no se disuelven tras pocos segundos o minutos, sino que ellas mismas empiezan a formar "bancos de niebla". Las autoridades también destacan que hay muchos tipos diferentes de nubes naturales. Las formaciones de nubes chemtrail se pueden, sin embargo, diferenciar de las naturales: dejan intacta la estela original del vuelo durante horas. Se extienden en un período de 2 a 5 horas hasta formar una cubierta cada vez más cerrada, primero de color blanco y después, grisácea. Frente a la expectativa de lluvia y, consecuentemente, a un aumento de humedad en el aire, en los días que hay chemtrails cae el higrómetro a unos valores más bajos situados entre el 30 y 35%. Además, generalmente, de esas nubes nunca cae lluvia. Estas nubes que se forman a lo largo de un día con chemtrails son sin contorno y estriadas. Por otro lado, las autoridades remiten a la existencia de numerosas rutas de vuelo. También aquí son muy llamativas las acciones de los chemtrails: se forman grupos de 5 – 15 aviones, de 1 ó 2 pilotos y siempre muestran el mismo comportamiento de vuelo. Se cruzan de allá para acá y dejan estelas paralelas, tipo rejilla o cruces. 

Beneficios de miles de millones para la industria 

El proyecto climático mundial de los chemtrails es un negocio de miles de millones de costes, y al respecto no hay duda alguna. A pesar de estos costes, se lleva a cabo porque es altamente rentable. La industria gana más que lo que en el cielo se esparce. El negocio de los chemtrails podría ser un "Joint-Venture" entre la industria petrolero, farmacéutica y militar. 

¿Control mental con Psychotrails? 

Justamente en este tema hay que contar con la premisa oculta de los llamados "dual-active systems", sistemas que junto al efecto sobre el control climático, poseen otros cofactores desconocidos. Por ello se piensa en agentes activos de la industria farmacéutica, que quizá podrían tener un efecto sedante, en todo caso en el sentido de un "mind-controlling".
Este tipo de sospecha surge sabiendo que tales ensayos de masas ya se hicieron en San Francisco a principios de los años 60 y que ha sido comprobado con la desclasificación de las actas del FBI.
 Las series de esparcimiento de los chemtrails se siguen realizando a un ritmo semanal. Principalmente se esparce por la noche para que la niebla esparcida se eleve a través de las capas de aire más calientes, así como en las primeras horas de la mañana. Dado que en los días despejados, la radiación ultravioleta aumenta considerablemente es cuando se realizan los esparcimientos. La mejor hora de observación es por la mañana temprano en aquellos días en los que la previsión meteorológica ha anunciado un tiempo soleado y despejado.
de: Libertad Controlada