lunes, 24 de septiembre de 2012

Nazis, masones, fruticultura y narcotráfico




Drogas en el camino de las manzanas


José Francisco Canosa Sánchez estuvo vinculado durante décadas al comercio de frutas del Alto Valle. Actualmente reside en Brasil. Afirma que existió un vínculo entre ex militares alemanes radicados en Argentina y el narcotráfico y reúne pruebas para revelar este vínculo en un libro. La historia tiene su capítulo local. Hace más de 40 años se habría usado el circuito de las peras y manzanas para el comercio de drogas ilegales, algo que, hasta hace apenas una semana, no registraba antecedentes.
por Susana Yappert
José Francisco Canosa Sánchez es un ex vecino de General Roca, Río Negro, que vive hace 22 años en Piçarras, Santa Catarina, Brasil, pero estuvo vinculado durante décadas al comercio de la fruta del Alto Valle. Hace un tiempo comenzamos a escribirnos porque se cruzaban algunas de nuestras investigaciones en torno a la historia regional. Fue entonces que me contó que estaba escribiendo una novela titulada “Los primeros barones del narcotráfico”, cuyo protagonista es otro ex vecino de la región, el alemán y ex presidente de la Cámara Agraria de Cervantes, Albrecht Boheme, quien habría dirigido grandes embarques de drogas utilizando la ruta de la fruta valletana. Una historia interesante para visitar estos días en los que se descubrió uno de los cargamentos más importantes de cocaína que registra la Argentina en un conteiner de manzanas con destino a España.
Según Canosa Sánchez, existió un vínculo entre ex militares alemanes radicados en Argentina y las drogas. Y reúne pruebas para revelar este vínculo desconocido en un libro. Lo interesante de esta historia es que tiene su capítulo local, que hace más de 40 años, sumó el comercio de drogas el circuito que recorrían las peras y manzanas que salían del Valle hacia el mercado interno y hacia el exterior, algo que hasta hace una semana no tenía antecedentes.
Albrecht Boheme, un alemán con profusa biografía, sospechado de alojar en su chacra de Cervantes al ex jerarca nazi Joseph Mengele y a Hans Rudel; según le consta a Sánchez, habría sido también un narcotraficante.
La afirmación podría ser interpretada como un capítulo más de la leyenda Boheme, pero el relato de Canosa Sánchez cobra sentido cuando habla en primera persona, cuando revela que fue testigo involuntario de una operación de trafico de drogas provenientes de la zona cordillerana, de paso por el Valle con destino a Córdoba, operación coordinada por Boheme, a quien Sánchez asistió circunstancialmente como chofer y “hermano” de confianza de la Logia Masónica hacia 1983 (ver “Fragmentos…”).
Según el autor del libro aún inédito, Boheme usó todos sus recursos para convertirse en uno de los primeros “barones de la droga” a nivel local;  incluido el pasaporte que le significaba ser parte de la Federación de Productores de Río Negro y Neuquén;  sus relaciones comerciales con camaradas alemanes de la cordillera, todos miembros de una logia masónica con sede en Chile, quienes formaban parte de una vasta red dedicada al narcotráfico, y que incluía también a la estructura de Corpofrut y frigoríficos exportadores de carnes y pescados.

Albrecht Boheme
Canosa Sánchez tiene su primer contacto con Boheme por la principal actividad económica de la región, la fruticultura; pero gana su confianza cuando acepta la invitación del controvertido alemán para ingresar a la Logia Masónica. “Conocí a Boheme en la década del 60 y lo ayudé en su vejez a solucionar muchos problemas hasta el día de su muerte. Fue él quien me inició en la Masonería a comienzos de los ‘70”.
Canosa Sánchez cree que el voto hacia él, probablemente, se determinó por la relación que Boheme tuvo con su tío materno, Francisco Javier Canosa, un personaje fundamental en la biografía de Boheme al finalizar la Segunda Guerra. “Mi tío fue un peronista que de simple funcionario ascendió a cónsul en Yugoslavia en tiempos de Perón y que habría ayudado a salir a algunos alemanes perseguidos en Europa hacia Argentina, vía el puerto de Trieste, a cambio de bienes” (ver PDF adjunto). Efectivamente, fue éste funcionario quien ayudó a escapar a Boehme y a su esposa.
 “La vida de este hombre es fascinante. Decidí escribir esta historia por mi pasión por la historia y la literatura, pero sobre todo por el personaje. Considero que Boheme merece un libro, porque trae muchas otras connotaciones históricas, como la de los nazis en Argentina, las drogas, la relación de Perón con los nazis, las mafias; la vinculación en la que aparece mi tío Pancho como Embajador en Yugoslavia, la CIA; y otros temas que aparecerán en el libro, como los hechos políticos de la fruticultura valletana y datos de la vida personal de este alemán. Si bien la dimensión de narcotraficante es nueva, se trata de un aspecto más de un personaje muy rico. Con sólo mencionar que participó en la operación Walkiria, el atentado contra Hitler, por el que fue perseguido por las propias SS, podemos advertir su perfil”.
Canosa Sánchez tomó contacto con Boheme cuando administraba La Bodega Berardi, “entonces se estaba formando la Cámara Agraria de Cervantes. Recuerdo una vez, en enero, estábamos preparando un despacho de vinos para Bahía Blanca cuando vi la pick up Chevrolet 64 de Boheme, quien me llamó a los gritos. Al aproximarme lo vi desnudo, había peleado con su amante, que lo había dejado sin ropas en las bardas. Le conseguí ropa de un peón ya que las mías eran pequeñas para su cuerpo. Desde entonces fuimos estrechando vínculos. En su vejez fui su hermano fiel, ya que sus amigos y hasta sus abogados lo abandonaron o se aprovecharon de él. Impedí su suicidio, organicé su viaje a Estados Unidos y a Europa para rescatar a su hija alemana, hija extramatrimonial que había tenido con una enfermera durante la guerra, a quien dejó una herencia de un millón de dólares. Organicé el entierro de Bertha, su esposa. Pero hubo algo muy importante, en aquella época, me inició en la Masonería. Fui iniciado en el año 1970 al grado de Aprendiz, luego de estudios preliminares y de leer libros sobre la naturaleza masónica. Era una Logia pequeña. Sus bases estaban en Chile. Estaba formada por alemanes. A esa Logia asistían muchos masones de otras corrientes. En el Valle había gente de Regina y de Neuquén, sobre todo militares, muchos comisarios, y algunos políticos.”

En la Logia
 “Cuando me inicié La Logia funcionaba en el Tiro Federal de Roca, allí se montaba y se desmontaba la noche del miércoles el piso de mosaicos blancos y negros. Aún hoy participo. En Brasil me reconocen como Hermano Mason, solo que tengo voz, pero no voto. Aquí en Brasil la actividad no es discreta, como lo era en Argentina cuando yo vivía allí.”
Los años pasaron, y en 1983 el Aprendiz descubrió la actividad ilícita en la que participaba su hermano de la Logia, Boheme. Le tocó ser involuntario protagonista de una operación en la que se transportaba droga desde el Valle con destino a Córdoba. En la operación participaba Boheme, sus socios alemanes de Bariloche en connivencia con policías locales. “Boheme utilizaba claramente a la masonería como escudo, por el poder que le daba estar en ella, pero su conducta nunca sería aprobada por los masones, que fuimos simplemente engañados por él”, aclara su biógrafo.

Testigo involuntario
Canosa Sánchez manejaba en esa oportunidad la camioneta de Boheme. Le había pedido que lo acompañara hasta La Pampa. En una parada en una estación de servicio, ya en la vecina provincia, dos oficiales de la policía pampeana y un oficial de la Policía Federal, le preguntaron por Boheme. “Boheme, que estaba tomando un café, se acerca y me presenta como compañero de viaje. Al darles la mano supe que estaba entre hermanos masones”.
En adelante, esta condición será clave en todos los protagonistas de esta historia.
De cualquier modo la situación que se presentó esa madrugada lo inquietaba. Era mayo de 1983. “Boheme me dio la orden se seguir al Ford Falcon de la policía provincial y en menos de 10 minutos estaba estacionado en el frente del edifico de la Policía de la provincia de La Pampa. Luego de 30 minutos de espera, un Sargento golpeó mi ventanilla, pidiendo autorización para subir y emprender un viaje corto. Tenía miedo, no veía al Mayor del Ejército alemán al que acompañaba en ese viaje. Al arrancar, el sargento primero me dijo por dónde debía transitar, pidió autorización para fumar. Llegamos a destino. Era un pequeño cementerio de un pequeño pueblo, a pocos kilómetros de la capital pampeana. La noche estaba avanzada. Vi venir a otro auto. Respiré aliviado al ver a Boheme bajando del Falcon. Vi una camioneta Ford de doble cabina de la que bajaron más policías que se dirigieron rápidamente a un coche fúnebre carrozado del que bajaron 3 policías más que portaban dos carretillas. Sobre las carretillas apoyaron unas bolsas negras que eran transportadas hasta una fosa abierta. Los paquetes eran acomodados en el fondo de la fosa y con una pala fueron quebrados. La luz de la linterna mostraba un polvo blanco, encima fue colocada cal virgen y enseguida varios baldes de agua, todo en el más absoluto silencio. Luego vi que 6 policías traían un cajón de muerto que fue bajado a la fosa, se cubrió con tierra y partimos inmediatamente”.
El reloj marcaba las 5 de la mañana. El sargento primero le dijo: “Amigo Sánchez, el único consejo que puedo darle es el siguiente: No vio nada, no conoce a nadie y si algún día quiere contarlo, escriba un libro, pero dentro de 30 años.”
“El reloj marcó las 7 horas de esa madrugada fría del mes de mayo. Los seis desayunamos y nos despedimos con un apretón de manos, clásico de nuestra orden, y escuché decir al Oficial de la Policía Federal: “Todas las glorias a Dios, nada a mí“, y respondí “Todo en su nombre”.

Nazis
“Cuando todos se fueron, Boheme me ordenó que le buscara su portafolio que estaba detrás del asiento de la camioneta. Mi sorpresa mayor fue ver la cruz gamada marcada a fuego en el frente. Boheme sacó del portafolio una carpeta que me extendió. Era un salvoconducto firmado por El ministro plenipotenciario argentino con sede en Belgrado, Yugoslavia. Ese ministro era Francisco Javier Canosa, mi tío materno. Su misión nada tuvo a que ver con salvar gente común. Como más tarde puede saber por boca de mi propio tío, su tarea en tiempos de posguerra fue reclutar a unos 1000 personajes hitlerianos, a los que ayudó a salir de Europa por la denominada ‘Ruta del Vaticano’.”

Atando cabos
Aún así, Sánchez tardó en relacionar ese hecho con lo que había protagonizado esa noche en La Pampa. Pero fue atando cabos. “Entendí entonces que cuando Boheme conoció a mi tío dejó de ser un soldado del Tercer Reich, para convertirse en un mercenario. ‘Amigo Sánchez, me dijo Boheme aquella madrugada, todo tiene un comienzo, a partir de hoy le contaré mi vida, solo le pido que sea comprensivo y que analice todos los hechos’. Aquel día comenzó un nuevo capítulo en nuestra relación. Poco a poco me fue contando su historia, que incluía este aspecto tan oscuro como desconocido, el del traficante que usó a la Masonería, a Corpofrut y todo lo que estuvo a su alcance para comerciar drogas”. Canosa Sánchez le reprochó a Boheme que lo involucrara a él y a otros hermanos masones en semejante historia. “Me pidió que lo disculpara y fue entonces que me contó que esa noche había asistido a una negociación en la que se transportaban 285 Kg. de cocaína que iban en 4 ruedas de auxilio de la camioneta que venía desde Bariloche. Me dijo que en esa época no tenía a nadie en quien pudiera confiar. Obviamente me usó, me engañó, pero el juramento masón nos obliga a defender al hermano (una ayuda al hijo de la viuda, en código masón).”                                

Klaus Barbie
Aquella noche, Canosa Sánchez se enteró de más. “La droga era introducida al país desde Bolivia. Klaus Barbie la enviaba desde Bolivia a Bariloche y Boheme era el encargado de su distribución.  Barbie, su mujer y sus dos hijos llegaron a Bolivia en 1951. Allí, adoptó el apellido de Altman (el del rabino de su pueblo natal) y comenzó a dirigir un aserradero en La Paz, negocio al que se dedicó antes de comerciar quinina y establecer relaciones con ex nazis refugiados en países vecinos y con los militares locales. Durante la dictadura del general René Barientos, quien llegó al poder en 1964 tras un golpe de Estado, Barbie fue nombrado gerente general de la compañía marítima estatal, la Compañía Transmarítima Boliviana, creada en 1967 con capitales públicos y privados, la que habría usado para traficar armas y drogas.

Con manzanas
Boheme, en contacto con Barbie, recibía en Bariloche la droga que llegaba desde Bolivia. Según relata Sánchez, Boheme le contó que solía transportarla con peras y manzanas hacia otros puntos, y que él mismo acompañaba en su distribución hacia Córdoba, Rosario y Buenos Aires. En Buenos Aires operaba una empresa de alemanes que juntaban a todos los recién llegados, era una sociedad anónima con sucursales en Bariloche, Córdoba, Santiago, La Paz y San Pablo. La empresa se llamaba “Capri” y su sede estaba en avenida Córdoba al 300. Allí Boheme habría tomado contacto con personajes como Carlos Fuldner, el croata Ante Pavelic, Adolf Eichmann, el belga Byttebier, y Hans Rudel, entre otros.
Uno de los negocios que manejaba la firma era el comercio de drogas. “Comenzaron enviando metanfetamina (pervertin) a Europa en submarinos y, luego, la droga D-IX. Cuando Klaus Barbie se hace fuerte en Bolivia se dedican a la cocaína y se rearma el circuito, siempre con una base en Argentina que era Bariloche”, y utilizando rutas comerciales como lo fue la que recorrían las manzanas del Valle hacia el mercado interno y hacia el mercado externo. “Abastecieron  con submarinos ya obsoletos para uso militar hasta comienzo de los años 60 a Europa y las dos costas de Estados Unidos, la oeste a través de Chile, hacia donde se cruzaba en camiones de maderas”.
Esta asociación ilícita entre alemanes refugiados en Argentina, según afirma Canosa Sánchez en la investigación que le llevó años, fue posible por la connivencia de contactos locales que mantuvieron el secreto mediante el pago de importantes coimas, fundamentalmente en puestos fronterizos. “Estos alemanes fueron los primeros barones de la droga en el Cono Sur”, concluye.


                        http://www.fruticulturasur.com/fichaSubNota.php?articuloId=918&subnotaId=517

                                             

         http://www.fruticulturasur.com/upload/articulos/archivos/CANOSAJavierFrancisco.pdf
                                                     

BIBLIA DESCONOCIDA.





                                                           La Biblia Kolbrin.



La Biblia Kolbrin es una antología secular que tiene al rededor de 3600 años, la primera parte fue escrita en la misma época que se escribió el antiguo testamento, escrita por numerosos autores que van desde los egipcios hasta los Celtas, y fue escrita en dos partes al igual que el “Viejo y el Nuevo Testamento”. Está formada por 11 libros, los primeros 6, fueron escritos por los antiguos egipcios, y los demás por sacerdotes celtas, se cree que la parte más antigua fue escrita luego del éxodo, que para algunos ocurrió en el siglo 15 A.C.

Se dice que encotraron la Biblia Kolbrin En Inglaterra en el siglo 12, manuscritos salvados antes del incendio del Monasterio de Glastonbury y guardado por un grupo llamado “Los Culdianos“, al igual que los partidarios de la profecía de Orion, los que creen en la biblia kolbrin dicen que habla sobre una advertencia sobre un desastre de tipo espacial, tal ves una catastrófica inversión de los polos, según los expertos esto sería un evento que ocasionaría un exterminio global, acabaría con un 90% de la vida en el planeta. Hoy en día sabemos por pruebas científicas, que un cambio en los polos es posible, incluso se sabe que el planeta tierra ya ha pasado por eso, pero no es un proceso “de un día para otro”, es un proceso que puede tomar años en darse; también es sabido que un cambio en los polos ocasionaría grandes problemas en las comunicaciones, satélites, celulares, GPS…pero de ahí a que “acabe con todo” en un abrir y cerrar de ojos, lo dudo mucho.

La Biblia Kolbrin es el primer documento judaico/cristiano que une nuestra comprensión científica de la evolución humana, el creacionismo y el diseño inteligente. Los principios matemáticos del Kolbrin reflejan el interés antiguo de los druidas en las estrellas, las matemáticas y las catástrofes ocurridas a nivel mundial. Así mismo, narra la historia de la creación humana incluyendo a culturas anteriores a la llegada de Adán y Eva.

El Kolbrin tiene una de las historias más “elegantes” de la llegada de Adán y Eva. También surge la historia de la Atlántida y Lemuria así como la historia del “Eden” y las catástrofes en la humanidad.

La primera parte del Kolbrin contiene la historia de la creación, que se lee tanto como un texto religioso como un texto científico. Los dos últimos libros del Kolbrin están dedicados a Jesús.

Según la biblia Kolbrin, la fuerza “extraterrestre” que desencadena este evento no es el sol, si no, un misterioso astro que la profecia denomina “El Destructor”, el texto dice que no colisionara con la tierra, si no que pasara muy cerca, y causara una destruccion mundial. Este astro tiene su propio campo magnético, vale decir positivo y negativo, nuestro planeta también, no tienen que chocar, con solo rosarlo puede causar sacudidas en la tierra. La Bilia Kolbrin dice también que “el destructor”, ha pasado por la tierra varias veces, según el documento la última vez que paso fue hace 3600 años, fue cuando devastó a Egipto.

Resulta muy interesante destacar, y dejando de lado las “predicciones catastróficas del 2012″, que no solamente este texto antiguo habla sobre algún incidente que relaciona la llegada/regreso de algo que podríamos simplificar llamándolo “astro”. Otras culturas antiguas también relatan en sus textos algo similar; no sabemos que pudo ser, si un cometa, asteroide, planeta, o alguna nave espacial; pero lo cierto es que estos relatos están escritos en casi cualquier texto antiguo.

Los textos hablan de “algo” que ha pasado en varias ocasiones, algún tipo de catástrofe, así que pienso que podríamos descartar a un cometa o asteroide, ya que como sabemos este “astro” regresa a visitarnos después de cierto tiempo. En la Biblia Kolbrin lo llaman “El Destructor” como se dijo anteriormente, pero también ha tenido otros nombres de acuerdo a cada cultura.

Los Sumerios lo llamaban (de acuerdo a las traducciones de Zecharia Sitchin) el “12º planeta” o “Nibiru” (el planeta del cruce). En Expresión Binaria tenemos un interesante y completo artículo que nos narra de forma histórica y a grandes rasgos la historia de los Sumerios.

Entre los Babilónicos fue conocido como “Marduk”, “El Rey del Cielo”, “El gran cuerpo pesado” y “Baal”. Los antiguos Hebreos lo llamaban “Yahweh“. Los Mayas lo llamaron “El Quezaqual del cielo”. Los griegos lo llamaron “Némesis“. En la Biblia cristiana lo podemos encontrar como “Ajenjo”, Estrella nombrada en el libro Apocalipsis de la Biblia, la cual amargará la tercera parte de las aguas de toda la Tierra. Para los indios Hopi es la “Estrella Azul o Roja”. El libro de las Revelaciones habla de “La Gran Estrella”. V.M. Rabolú (pseudónimo D. Joaquín Amortegui Valbuena, escritor esoterista colombiano). Se refiere a el en su libro “Hercólubus o planeta rojo”. Y así podemos seguir citando muchos otros nombres que ha recibido a lo largo de la historia.

Desde la antigüedad este “astro” fue conocido y se recibió diferentes nombres, encontrándose esto guardado en sus pasos previos tanto en el tradición como en textos antiguos. Los tres textos mas notables son la Sagrada Biblia, la Biblia de Kolbrin y los textos Sumerios.

Lo cierto es que sin importar el nombre que se le de, o las posibles causas que pueda traer, incluso descartando que sea verdad o que alguna extraña calamidad pueda caer sobre la tierra, lo interesante aquí es que es nombrado por muchas culturas antiguas, el famoso “astro” que regresará a la tierra después de un tiempo; entonces todas estas culturas antiguas que relatan estos hechos ¿estarían mintiendo?, ¿inventándose alguna fantasía? o de verdad pasó algo en la antigüedad que fue registrado por nuestros antepasados y que curiosamente está muy ligado a las historias de el Diluvio y el fin de la civilización Egipcia. Recordemos aquí las antiguas escrituras Sumerias, que nos hablan de los “Dioses que bajaron del cielo” y que a lo largo de la historia de la humanidad nos relatan catástrofes y calamidades que estos dioses traían a la tierra para castigar a los “pecadores”.



Según estos antiguos documentos, es una biblia paralela a la biblia clásica cristiana, pero es importante considerar que notablemente incluye más detalles relativos a ciertos pasajes tales como el Diluvio y el Éxodo. Nombran a “El Destructor” como un actor clave en ambos eventos, y hay muchas páginas que describen los terribles eventos por venir.

Capítulo Cuatro, titulado El Diluvio, del Libro de las Recopilaciones, párrafo 24:

Entonces, con el amanecer, los hombres vieron un pavoroso espectáculo. Allí, montado en una negra y retorcida nube, apareció el Destructor, recién llegado desde los rincones de los confines de los cielos, y descargó su ira en las alturas, porque era su día del juicio. La bestia que venía con él abrió su boca y arrojó fuego y piedras ardientes y un humo maligno. Cubrió todo el cielo, tal que no se podía divisar el lugar de encuentro entre la Tierra y el cielo. Por la tarde las estrellas se movieron, rodaron cambiando sus posiciones a otros lugares, y llegaron las aguas de la inundación.

Se abrieron las compuertas del Cielo, y los cimientos de la Tierra se resquebrajaron y se separaron. Las aguas en derredor se abalanzaron sobre la tierra y rompieron contra las montañas. Los cerrojos de las bodegas de los vientos estallaron repentinamente, soltando a las tormentas y torbellinos, que aullaron por sobre la Tierra. En las embravecidas aguas y estridentes ventarrones, todos los edificios quedaron destruidos, los árboles arrancados de sus raíces, y las montañas desplomadas. Hubo un momento de gran calor, y luego un amargo frío. Ya no se levantaron las olas por encima de las aguas, que cayeron hirviendo y arremolinándose mientras un pavoroso estruendo rugía en los cielos

De estas lineas podemos destacar, y a modo de opinión personal: “…montado en una negra y retorcida nube, apareció el Destructor…recién llegado desde los rincones de los confines de los cielos…abrió su boca y arrojó fuego y piedras ardientes…” Si hoy me dicen que “algo” apareció encima o entre una nube negra, lo llaman “El Destructor” (típico nombre alusivo de una nave espacial de película) viene de los confines del espacio, abre su “boca” o algún tipo de compuerta de ¿misiles?, para arrojar fuego y “piedras” que arden, diría sin dudarlo que algún bombardero apareció en el cielo lanzando misiles para acabar con todo, pero como dije es mi opinión personal.

Otros cuatro párrafos hasta el final del capítulo describen cómo las estrellas quedaron sueltas en los cielos (¿cambio en los polos?). Un barco que había sido construido fue arrastrado por el agua. Las aguas que llenaron los valles pasaron por encima de las cimas de las montañas en gran torrente. Luego el Destructor pasó, la inundación perduró por siete días, y el barco finalmente quedó reposando sobre la montaña de Ashtar. Y a continuación se describe la última pasada del Planeta 12 en el momento del Éxodo. Libro de los Manuscritos, El Destructor, Parte 3 del Pergamino de Adepha, Capítulo 5, párrafo 1:

El aspecto del Verdugo, llamado también el Destructor, fue visto en todo Egipto y sus alrededores. Su color era brillante y fiero, y de apariencia cambiante e inestable. Se retorcía alrededor de sí mismo, como el agua que entra burbujeante en una pileta por un surtidor sumergido, y todos los que lo vieron atestiguan que era la visión más horrible que se puede imaginar. No era sólo un gran cometa ni una estrella vagabunda sino más bien un feroz cuerpo de fuego.

De éste último párrafo podemos rescatar “Su color era brillante y fiero, y de apariencia cambiante e inestable. Se retorcía alrededor de sí mismo…” Tenemos un “objeto” de color brillante que “gira” en su mismo eje, y que cambia de posición de forma inestable/rápida/violenta.

Párrafo 4:

Este era el aspecto del Verdugo, llamado El Destructor, cuando apareció en días ya pasados hace mucho tiempo, en época remota. Así quedó descrito en los antiguos textos, de los cuales han quedado muy pocos. Se dice que cada vez que aparece en los cielos, la Tierra abre su vientre por efecto del calor, como se abre una nuez asada al fuego. Entonces las llamas explotan hacia arriba a través de la superficie del terreno y sus lenguas lamen la vecindad, como feroces demonios sobre sangre negra. El terreno queda calcinado y despojado de toda humedad, y los pastos, los cultivos y los árboles son consumidos por las llamas quedando convertidos en blancas cenizas

De éste párrafo también podemos sacar notas de interés, que al parecer continúan describiendo un patrón característico de este “objeto” que “aparece en los cielos” de manera periódica; aquí seguimos descartando que se trata de un cometa o algo parecido, es “algo” que viene al planeta cada cierto tiempo. Otra cosa que me llama la atención es, y cito “El terreno queda calcinado y despojado de toda humedad, y los pastos, los cultivos y los árboles son consumidos por las llamas quedando convertidos en blancas cenizas” Parece que en aquella época trataban de describir lo podríamos conocer hoy como una explosión de grandes magnitudes, quizás (y solo especulo) nos narran ¿explosiones nucleares?

A lo largo de la historia he podido darme cuenta de las similitudes que existen entre diferentes culturas y en diferentes épocas cuando narran las batallas entre los “dioses del cielo” y los esclavos (la raza humana), en la biblia de Kolbrin también lo vemos:

Párrafo 29:

El Faraón luchó contra la muchedumbre de esclavos rezagados y se impuso sobre ellos con gran matanza en medio de la arena, el pantana y el agua

Hay en este capítulo abundante descripción de masivos levantamientos del terreno provocados por la presencia del Destructor , no dejando duda que los esclavos sólo se las arreglaron para escapar en un instante de gran alboroto y a través de una anomalía del terreno.

¿Quien o qué era éste Destructor?

El Capítulo 3, El Destructor, Parte 1 del Gran Pergamino, Párrafo 1 nos dice:

Los hombre se olvidan de los días del Destructor. Sólo unos pocos conocen adonde fue y saben que retornará a la hora señalada

El párrafo 3 continúa diciendo:

Cuando pasan las edades , ciertas leyes actúan sobre las estrellas en los cielos . Ellas cambian sus caminos , hay movimiento e inquietud , ya no se quedan quietas , y una gran luz aparece rojiza en los cielos

El tiempo en que ocurrirá este evento se describe como: “…cuando las mujeres sean como los hombres, y los hombres como las mujeres“; ¿hablan acaso de los cambios de sexo que vemos a diario hoy en día? o “los hombres volarán por los aires como los pájaros y nadarán en los mares como los peces“; ¿nos hablan acaso de aviones y submarinos? o “entonces los altos disputarán la supremacía con los bajos“

Los misterios no dejan de sorprendernos, pero las especulaciones también lo hacen. Como siempre, hay que basarse en evidencias e investigación con fundamentos.

Egipto, Kolbrin, La Biblia cristiana y la Torah

Hay muchas similitudes encontradas en estos antiguos textos que podemos comparar con otros, como los textos sumerios, la biblia cristiana y textos egipcios. Como ya ha sido más que comprobado, mucho de lo que se cuenta en la biblia judeo/cristiana y de los textos egipcios vienen de antiguas escrituras Sumerias, todos estos documentos nos hablan de la creación de la humanidad, un Adán y una Eva como los primeros de una civilización “mejorada”, la ira de los dioses con los humanos que no actúan como ellos quieren, catástrofes como el diluvio y un largo etc. Muchas coincidencias, ¿no les parece?


Damaso Dominguez Ortiz